A todos nos ha pasado alguna vez, llevarnos a unos amigos a casa para probar una botella especialmente digna que hemos conseguido con unas tónicas de esas buenas… hay hielo grande y seco, las copas son adecuadas y están limpias, hay un limón y todo… pero para triunfar, lo que se dice triunfar, qué bien nos hubieran venido unos aromatizantes más…
Ahí reside la gran virtud de las frutas deshidratadas y liofilizadas: son una solución imaginativa y versátil para poder tener siempre un elemento distinto y de calidad que incluir en nuestros gin tonics. Nada que decir contra los productos frescos, pero las técnicas de deshidratado y liofilizado conservan magníficamente los aromas de la fruta y permiten una durabilidad mucho mayor.
Estaba echando un vistazo a los aromas disponibles en GIN TONIC PACK y la verdad es que la variedad es sorprendente, y las ideas de posibles combinaciones se sugieren casi solas. Y no sólo de aromas, visualmente también son elementos muy potentes. Se me acaba de aparecer un Tann’s con Boylan aliñada con mora y pepino; creo que el contraste de esos aromáticos ayudaría a una ginebra tan floral.
Posibilidades inéditas en la búsqueda del gin tonic definitivo
¿Qué sería de nosotros sin los clásicos, el limón y la naranja? Estos deshidratados pueden permitirnos dar un giro de tuerca a cualquier gin tonic; precisamente al haber eliminado casi toda la humedad, podemos jugar con la técnica de la infusión, variando mucho los tiempos y cantidades sin temor a que la fruta pierda brillo y frescura. Gin tonics personalizados con tu toque cítrico personal.
Los amantes del gin tropic están de enhorabuena gracias a la piña y el coco liofilizados. Pero no juntos, piña colada no, por favor… He visto usar la piña con G’Vine, pero a mí me llama más con ginebras bien secas o de corte oriental, como Old Raj o Jodhpur con Markham, y tal vez unos granos de granada. El coco será un excelente refuerzo para una Hoxton.
Sea en la ginebra, entre los hielos o en un poco de agua, una rehidratación suficiente de la fresa o la frambuesa puede ayudarte para crear composiciones más vistosas. Las bayas rojas, sean más ácidas o más amargas, son muy interesantes flotando en una copa de G’Vine (aquí sí) y QTonic. O de Brockmann’s, o de Bulldog. Tocado de lima. Hum, qué rico, voy a hacerme uno.